En los momentos actuales la crisis de la democracia pone en cuestionamiento la representación política. La problemática socio-económica en diversos países, no solo en los democráticos, ha llevado a un desencanto de la política. La voracidad de la nueva clase política, su falta de sentido del límite y el desprecio de las reglas exhibido en el vértice del Estado han hecho extenderse de nuevo los abusos de poder y los nego