Las alarmas saltaron el viernes en el Coliseum. Valverde perdía para enfrentarse a Osasuna a Yeray y Paredes por sanción después de ser expulsados ante el Getafe. A estas dos bajas, se unía la duda de Dani Vivian, que no había entrado en la convocatoria por una lumbalgia que ya le impidió entrenarse junto a sus compañeros en la semana previa. De golpe, el técnico podría no disponer de ninguno de los tres centrales específicos