El partido jugado el sábado en el Metropolitano quedó manchado para siempre por la lacra que invade el fútbol, el racismo. El choque se tuvo que detener en el minuto 36 por los insultos que sufrió Nico Williams cuando se disponía a botar un saque de esquina. “He escuchado sonidos de mono al sacar el córner. La verdad es que han sido pocos. Gente tonta hay en todas partes. No pasa nada, espero que esto vaya cambiando poco a poco, estamos llevando un