Ernesto Valverde tiene un auténtico dilema esta semana. El entrenador reconoció el pasado jueves en Lezama que habían jugado con fuego durante la temporada con solo tres centrales en la primera plantilla y sin decirlo claramente apuntó que era necesario un cuarto para la próxima campaña, con cuatro competiciones en juego, Liga, Copa, Europa (muy posiblemente Europa League con la Champions casi imposible) y Supercopa. Al día siguiente, sufrió